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Bruselas en video

Encontré un video que seguramente será de tu agrado. En estas imágenes podrás conocer cómo es Bruselas.

En Bruselas la oferta hotelera belga es excelente y se pueden encontrar grandes cadenas de hoteles, pero igualmente habitaciones acogedoras en casas de particulares, para todos los gustos. En Bélgica, no tendrás sorpresas desagradables con los baños o con el número de estrellas. Gozarás del rigor de la gente del norte sutilmente mezclado con la calma de la gente del sur.

Dos de los hoteles que sin duda te recomiendo para tu próxima visita a Bruselas son:

Hotel Husa President Park. Este hotel se encuentra a unos 2 km del centro de Bruselas, a tan sólo 400 m de la estación del norte. Con el transporte público llegarás al centro de la ciudad en pocos minutos y fácilmente.

Hotel Van Belle. El hotel está gestionado personalmente por la familia Venbelle, donde encontrarás un agradable recibimiento, así como un atento servicio por parte del equipo al completo. Este hotel de Bruselas se encuentra a poca distancia caminando desde la Grand Place, y hay un servicio de traslado disponible para llevarte al centro de la ciudad, tanto por la mañana como por la tarde.

Qué ver en Bruselas

Las principales atracciones incluyen la famosa Grand Place, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1988, con el Ayuntamiento de estilo gótico en el centro, la Catedral de San Miguel y Santa Gúdula y el Castillo Real de Laeken, con sus grandes invernaderos. En el entorno de la plaza se pueden observar las trazas de la antigua ciudad, de un estilo arquitectónico que en el país se conoce como estilo español, dado que los principales edificios históricos de estilo flamenco datan de la época en que la actual Bélgica, entonces Flandes, era una de las provincias del imperio de Carlos V. Otro emplazamiento notable es el Palacio Real de Bruselas.

Tómate una foto en el Manneken Pis, una fuente de bronce de un pequeño niño haciendo pis y que se ha convertido en otro de los símbolos históricos de la ciudad.

Otros lugares importantes de Bruselas son el Parc du Cinquantenaire con sus arcos del triunfo y sus museos cercanos, la Basílica del Sagrado Corazón, la Bolsa de Bruselas, el Palacio de Justicia y los edificios institucionales de la Unión Europea. La estatua de Europa (Unity in Peace) de la Comisión Europea en el jardín Van Maerlant (del escultor francés Bernard Romain)Etterbeek.

Los Museos reales de Bellas Artes de Bélgica son los más conocidos, con un Museo de Arte Antiguo y otro Museo de Arte Moderno, además de dos museos menores, dedicados en exclusiva a los pintores belgas Constantin Meunier y Antoine Wiertz, respectivamente.

Algunos de los más visitados además de los citados anteriormente son:

Museo de Vestimenta y el Encaje, donde podemos contemplar una colección de trajes, bordados, encajes, puntillas, calados.

Museo David y Alice Van Buuren, que se encuentra en una casa decorada y construida con estilo Art Deco, y contiene obras de Van Gogh y Bruegel entre otros.
Museo de la Villa de Bruselas, donde podemos encontrar cuadros, tapices, iconografía, escritos históricos, etc.Toda la historia de Bruselas se encuentra aquí.

Otras de las atracciones que debes visitar son:

Catedral de Bruselas
Basílica del Sagrado Corazón
Notre Dame du Sablon
Parque de Bruselas
Galerías Saint Hubert
Mini Europe
Barrio Europeo
Palacio de Coudenberg

Comer en Bruselas

La cocina de Bruselas no es reconocida a nivel mundial, pero eso no quiere decir que no ofrezca deliciosas creaciones gastronómicas. ¿Quieres sabes cómo saciar tu apetito en sta ciudad?

Entre los platos típicos de Bruselas se encuentran:

Mejillones: El gran clásico belga son: los mejillones, que pueden comerse con los dedos sirviéndose de la concha de uno de ellos.

Cervezas: En Bélgica se producen más de 500 cervezas diferentes con un amplio abanico de sabores y aromas que pueden conquistar hasta al más reticente.

Waterzooi: El waterzooi es un plato a base de pollo o de pescado.

Este plato único se sirve en una sopera y platos de sopa, cuyo caldo o concentrado se une a la crema o a la mantequilla. Se sirve acompañado de verduritas y aromatizado con cilantro.

Albóndigas a la liejense: Plato regional muy apreciado por todos. Grandes albóndigas de carne servidas con una salsa a base de sirope de Lieja, patatas fritas y compotas o ensaladas.

Croquetas de camarones: Las croquetas de camarones del mar del Norte son en cierto modo lo típico de la buena cocina belga. El gusto sutil de los camarones se sostiene en una bechamel ligeramente aliñada. Se reboza y a la freidora… ¡una delicia!

Carne a la brasa cocinada a la flamenca: La carne a la brasa cocinada a la flamenca es un gran clásico de la gastronomía belga.
Y para endulzar el paladar, nada mejor que probar:

Chocolate: Aunque a menudo pensemos en Suiza para el chocolate, quien pruebe el chocolate belga lo volverá a tomar. Ya sean los pralinés, los pequeños volovanes que explosionan de gusto en la boca o bien en tableta.

Gofres: Al igual que las patatas fritas, los gofres son muy belgas y vais a notar la diferencia, ya que a menudo los copiados, no son nunca iguales.

Speculoos: Imposible de pronunciar, imposible de escribir, con un color y un olor muy particular, el speculoos no es muy conocido, pero una cosa es cierta, una vez hayáis probado esta galleta seca tan ricamente aromatizada, ya no podréis pasar sin ella.

Tarta de arroz: Una verdadera tarta de arroz bien cremosa no dejará a nadie indiferente.